El sida es una enfermedad importante que puede hacer muy poco aconsejable el matrimonio.
Puede ocurrir que una chica se sometiera anteriormente a un aborto pero se arrepintió sinceramente, se confesó y encontró la paz. En este caso, no sería obligatorio decirlo a la pareja, pero puede decidirlo libremente si esto le deja más tranquila.
Si uno de los novios siente o ha sentido atracción por personas del mismo sexo o es bisexual, debe manifestar esta atracción homosexual a su pareja al comenzar el noviazgo. Si no sigue una terapia médica que reduzca considerablemente esa atracción, no debe contraer matrimonio. Si se llegara a la boda, esa atracción sería motivo de nulidad matrimonial.
Si alguno de los novios ha estado involucrado en un caso de pedofilia (sexo con preadolescentes) o de efebofia (sexo con adolescentes), debe comunicarlo a su pareja antes del noviazgo, pues si no lo hace, puede ser causa de nulidad.