
En el Antiguo Testamento se nos dice que «en el principio creó Dios el cielo y la tierra» (Génesis 1,1). Fue creando la luz y las estrellas, la tierra y el mar, las plantas, los animales y todas las cosas. Por último creó al hombre. Y vio Dios que era bueno todo lo que había creado. No es lo mismo crear que fabricar. Crear quiere decir «hace que exista algo que antes no existía, sacándolo de la nada». Dios creó las cosas sin utilizar ningún material ni utilizar instrumentos.
Fabricar es producir objetos utilizando materiales y herramientas. El hombre puede fabricar cosas con ladrillos, baldosas, cemento y otros materiales. También puede fabricar vestidos, coches y otras cosas. Pero el hombre no puede crear.
Además de crearlas, Dios cuida y gobierna toda la naturaleza con sabiduría y bondad.
Cuando los hombres fabrican o hacen cosas, como coches, casas, aviones, etc. colaboran con su trabajo en la construcción del mundo y este trabajo lo puede ofrecer con amor. La Biblia dice que Dios creó al hombre para que trabajara.