Varias ciudades italianas fueron focos del Renacimiento como Roma (con el apoyo de los Papas Julio II y León X), Florencia (con los mecenas (protectores) Cosme de Médicis y Lorenzo el Magnífico), Milán (con Ludovico el Moro), Venecia (con las mejores imprentas) y Nápoles (con Alfonso V el Magnánimo).
Los tres artistas más destacados son:
– LEONARDO DE VINCI es el genio más universal del Renacimiento considerado por algunos como la cabeza más privilegiada de la Humanidad, que sobresalió como pintor, escultor, arquitecto, ingeniero, músico, astrónomo, matemático y físico. Sus obras de pintura más destacadas son la Cena y la Gioconda o retrato de Mona Lisa.
(Ver cuadro al margen).
– MIGUEL ÁNGEL fue un excelente escultor, con su gran obra de Moisés de la tumba del Papa Julio II. Entre sus pinturas destaca la Capilla Sixtina y el Juicio Final.
– RAFAEL DE URBINO fue un pintor de fama universal que tendía a embellecerlo todo con un tono dulce y poético; sus obras están llenas de serenidad y felicidad. Sus principales obras se encuentran en el Vaticano, como la Escuela de Atenas, la Disputa del Santo Sacramento, el Parnaso y la Transfiguración.