Tenía un carácter serio y reservado, aunque con sus hijos era un padre afectuoso y preocupado por las cuestiones familiares. Fue muy religioso y asistía a misa todos los días. Juan Martínez, profesor de la universidad de Salamanca, le proporcionó una sólida educación.
Felipe II fue el monarca más poderoso de su tiempo. A los territorios heredados de Carlos V (excepto Alemania y Austria) incorporó Portugal y sus extensas colonias de África, América y Asia. Además se conquistó la Florida, la región del Plata, las islas Filipinas y otras islas de Oceanía. Por eso se dijo que en la España de Felipe II no se ponía el Sol.
Al final de su vida se retiró al monasterio del Escorial, donde falleció.