En el matrimonio es importante crear situaciones de pasarlo bien haciendo la vida agradable al otro. Es bueno buscar momentos para disfrutarlos hablando de las cosas que les afectan. A veces una esposa pede levantarse con buen ánimo y ser la primera en darle los buenos días o recibir al marido calurosamente cuando regresa a casa aunque el día haya sido caótico.
Otro aspecto es estar interesado en las cosas del otro y contar con él para los diversos asuntos. Sería incoherente que cada cónyuge se hiciera un mundo aparte, sin dejar entrar al otro en él y sin interesarse por el mundo del otro.
Puede haber un problema conyugal si uno de ellos se sintiera solo y poco valorado por el otro cónyuge. Cada uno necesita que el otro crea en él, reconozca su valía y le ayude a crecer. Se puede considerar feliz el que esta necesidad la vea satisfecha.
(Pintura: Conversación en el parque. GAINSBOROUGH, Thomas. Museo de Louvre. París)
