Es el proceso por el cual una parte de la Península Ibérica asimila la cultura árabe, que influye también en los Estados cristianos. Podemos distinguir:
– LA POBLACIÓN. Había varias clases sociales y razas:
+ La población anterior formada por los hispanorromanos y visigodos constituía el 90% de la población total. Los mozárabes eran cristianos y los muladíes eran los convertidos al islamismo.
+ Los árabes eran muy pocos pero los más influyentes.
+ Los berberiscos constituían la gran masa de combatientes invasores.
+ La convivencia entre cristianos y musulmanes fue pacífica en muchos períodos de la Reconquista. Ver el dibujo superior del «Libro de Ajedrez» de Alfonso X el Sabio en el que echan una partida un caballero cristiano y un guerrero musulmán.
– LA ECONOMÍA. Al-Ándalus era considerada la tierra privilegiada del mundo islámico.
+ En agricultura cultivaban el trigo, el olivo, la vid, los cultivos de huerta, los árboles frutales, el arroz y la caña de azúcar.
+ En cuanto a la minería explotaban minas de hierro, plata, oro, mercurio, plomo y estaño.
+ En industria sobresalió la textil, cerámica, cristalería, cuero y orfebrería.
+ El comercio prosperó espléndidamente con Siria, Egipto, Bizancio y otros países.
– EL DESARROLLO DEL SABER tuvo la protección de emires y califas.
+ La enseñanza se impartía en las mezquitas y consistía en la lectura y escritura del Corán.
+ También cultivaron la poesía, la historia, la filosofía y las ciencias.