
Son masas de aire que se trasladan sobre la superficie de la Tierra. Este movimiento se realiza desde los lugares de altas presiones a los de bajas presiones. El anemómetro es el aparato utilizado para medir la velocidad del viento, mientras que la veleta nos señala la dirección. Los vientos pueden ser de varias clases:
– Constantes, que soplan siempre en la misma dirección. Ejemplo: los alisios, que van siempre en dirección al Ecuador.
– Periódicos, que soplan en determinadas épocas del año. Ejemplo: los monzones de verano soplan del mar a la tierra, en el sudeste de Asia, mientras que los monzones de invierno soplan de la tierra al mar. La brisa costera diurna sopla del mar a la tierra y la brisa marina nocturna va de la tierra al mar. (Ver el dibujo)
– Variables son los que no tienen una dirección constante.