También son pecaminosas las caricias estimulantes que provocan una excitación sexual. La lujuria es la búsqueda del placer sexual en desacuerdo con la recta razón. La excitación sexual prepara a la persona a la relación sexual u orgasmo, pero si sólo hay excitación, se trivializa la sexualidad, es decir, se está usando como un juego.
Los novios en sus citas y salidas pueden compartir su amistad, su afecto y el amor de donación que serán el fundamento del futuro matrimonio. Esto es bueno y deseable, pero los besos apasionados o cualquier otro acto que estimule el deseo del sexo es claramente inmoral.
La pornografía consiste en dar a conocer actos sexuales, reales o simulados, fuera de la intimidad de los protagonistas, exhibiéndolos ante terceras personas de manera deliberada. Ofende la castidad porque desnaturaliza la finalidad del acto sexual. Los que se dedican a la pornografía, ya sean actores, cineastas y espectadores atentan contra la dignidad del hombre y la mujer a los que tratan como objetos de un placer rudimentario y buscan una ganancia ilícita. Es falta grave.
Los besos con lengua o frends kiss tampoco son aceptables. Puede ser que a alguna chica no le exciten pero está claro que a los chicos normales les produce excitación. Si a un hombre no le produce placer un beso con lengua es posible que esté insensibilizado, y esto puede suponer que anteriormente haya habido mucha experiencia sexual.