Lección de Tentaciones

Duración: 10 minutos

Objetivo:

 Pedir ayuda en las tentaciones del demonio.


    En el Padrenuestro pedimos a Dios que nos libre de toda tentación y mal. Dios permite, en sus inexcrutables designios, que seamos tentados por el demonio, el mundo y la carne.


    Contra las tentaciones que nos inducen al pecado, tenemos que estar vigilantes contra ellas, pidiendo al Señor nos dé su gracia para vencerlas. Jesús nos anima a ello, diciendo: «Velad y orad para no caer en la tentación; el espíritu está pronto, pero la carne es flaca». (Mateo, 26.)


    Cuando vencemos las tentaciones con la oración y la gracia de Dios, nuestra alma se vigoriza contra el pecado y el mal y se adquieren méritos para el Cielo.


    También pedimos en el Padrenuestro que Dios nos libre de todo mal, como de las guerras, enfermedades, miserias y tribulaciones, y si tenemos que pasar por ellas por disposición de Dios, pidámosle nos otorgue su gracia para llevarlas con paciencia y mansedumbre.

Volver a: Sugerencias metodológicas